Por: FETUR Nacional
La Escuela Superior de Turismo del Instituto Politécnico Nacional lleva casi un mes en paro. Lo sorprendente no es el paro, sino el silencio. No hay análisis, ni conversación en el sector, apenas algunas notas vagas y sin contexto que pasaron inadvertidas entre los titulares de siempre. Y eso, en sí mismo, ya dice mucho.
Si el turismo es una de las principales fuentes de ingreso para México —la tercera, según los datos más recientes—, ¿cómo es posible que una pausa en la formación de capital humano no sea noticia para el propio sector? Si hablamos constantemente de crecimiento, competitividad y sostenibilidad, deberíamos empezar por reconocer que sin educación actualizada, sin pensamiento y sin conocimiento vivo, no hay desarrollo que dure.
Me enteré hace pocos días. No voy a fingir que lo seguía de cerca, pero me quedé pensando: ¿debería haberlo sabido antes? Tal vez. Pero lo inquietante es que nadie pareciera saberlo. Que no se haya puesto sobre la mesa, ni en los espacios empresariales ni en los institucionales, dice mucho sobre la desconexión que tenemos con la raíz del turismo: las personas que lo hacen posible.
Las escuelas de turismo no son entidades aisladas. Son el punto de origen del talento, de las ideas, de la estructura mental con la que después operamos destinos, empresas y políticas. Cuando una institución como el IPN se detiene, no solo se detienen las clases: se detiene un proceso de pensamiento sectorial. Y el silencio frente a eso revela una falta de articulación entre educación, industria y visión pública.
Mientras hablamos de innovación y digitalización, seguimos sin preguntarnos quién está formando a quienes van a liderar esa transformación.
De poco sirve invertir en tecnología si seguimos formando en esquemas del siglo pasado.
De poco sirve hablar de sostenibilidad si los nuevos profesionales no entienden el turismo como un sistema vivo que necesita conocimiento, análisis y responsabilidad compartida.
No se trata de buscar culpables ni de tomar postura sobre un conflicto que tiene sus propias dinámicas internas.
Se trata de entender que este paro expone un hueco estructural en la conversación turística de México.
Y que si el sector no es capaz de mirar hacia su propio semillero de talento, difícilmente podrá hablar de soberanía, innovación o futuro.
Esperemos que el conflicto en el IPN se resuelva pronto.
No solo por los estudiantes o por la institución, sino porque el turismo mexicano necesita que su pensamiento no se detenga.
Tal vez el verdadero paro no está en las aulas, sino en la falta de atención colectiva a lo que debería importarnos más.
															Margarita Carbajal Carmona
Actual Presidenta Nacional de la Federación de Empresarios Turísticos A.C. (FETUR). Con mas de 30 años de experiencia en el ámbito empresarial ha liderado proyectos exitosos en la industria, destacando como Directora General de MARTOM S.A. DE C.V., una reconocida Tour Operadora en Cozumel. Además, ha desempeñado roles clave en organizaciones de renombre, promoviendo el desarrollo de la implementación de tecnología en el sector turístico y la colaboración empresarial.